Perder una patente y otras formas de sobrevivir
Muchas veces escuchamos a la gente decir que ha patentado un nuevo producto. Tendemos a asentir con la cabeza y darle nuestra enhorabuena por haberlo hecho, pero ¿verdaderamente sabemos qué es una patente? ¿Qué hay a cerca de perder una patente? ¿Necesitamos a un bufete de abogados para que nos gestione la solicitud?
¿Qué es realmente una patente?
La Oficina Española de Patentes y Marcas (OEPM) define una patente como “un título que reconoce el derecho de explotar en exclusiva la invención patentada, impidiendo a otros su fabricación, venta o utilización sin consentimiento del titular. Como contrapartida, la Patente se pone a disposición del público para general conocimiento”, por lo que se deberá comercializar.
El derecho que otorga una patente no es tanto el de proteger la innovación como el de impedir la competencia. Con la patente se pretende evitar que otros fabriquen, utilicen o introduzcan el mismo producto en el mercado.
Para que una invención pueda ser patentada debe ser nueva, contar con una actividad inventiva y tiene que poder aplicarse a productos. Desde el momento en el que se presenta la solicitud, la patente contará con una duración de 20 años.
Las patentes son derechos territoriales, es decir, solo tienen validez en el país o región en los que se ha presentado y concedido la solicitud. Pero en caso de querer que la patente tenga mayor cobertura de territorio, existen otros dos tipos de patentes además de la nacional:
- La Patente Europea: se produciría una patente nacional en cada uno de los 38 países europeos inscritos en el Convenio Europeo de Patentes.
- La Patente Internacional: la patente nacional quedaría protegida en los diferentes países suscritos en el Tratado de Cooperación en materia de Patentes.
Realizar una solicitud de patente con ayuda de un despacho de abogados
En caso de estar interesados en realizar una solicitud de patente, los solicitantes pueden realizar todo el papeleo sin necesidad de contratar a un bufete de abogados, pero debido a que existen algunos documentos complejos que involucran conocimientos jurídicos, contar con la ayuda de un despacho de abogados no es mala idea.
A lo largo de la solicitud de patente al cliente le pueden surgir dudas, por lo que los abogados deberán ayudarle. La Oficina de Patentes y Marcas presenta en su página web un escrito con algunos puntos en los que el bufete podría ayudar a su cliente como por ejemplo cuando es el momento idóneo para entregar la solicitud de patente, orientación en aspectos financieros, qué es la táctica de la nueva presentación, entre otras.
Una vez resueltas las dudas, solo queda presentar la solicitud o bien en una oficina de patentes o a través de internet. En la solicitud de patente deberá figurar el título de la invención, su ámbito técnico, los antecedentes y descripción de la invención y el motivo por el cual se solicita la protección por patente. En ocasiones es necesario presentar una serie de documentos a la oficina de patentes, en cuyo caso, contar con un bufete de abogados será de mucha ayuda.
¿Qué pasa cuando una empresa pierde la patente?
Una patente tiene una duración de veinte años desde la fecha de su presentación y los modelos de utilidad tienen una vida de diez años. Durante este periodo, si alguien se ha apropiado de la invención patentada, hay que informar a un Agente de la Propiedad Industrial. Él será el encargado de valorar si realmente se ha producido una apropiación indebida y cómo resolverlo. Pero una vez finalizado el plazo de exclusividad, la invención pasa a ser de dominio público y puede ser utilizada libremente.
Cabe destacar que no solo se puede perder una patente una vez finalizado su periodo de exclusividad. Para mantener en vigor una patente, el titular debe abonar cada año las anualidades correspondientes. El pago debe realizarse antes del último día del mes del aniversario en el que se presentó la solicitud. En caso de no abonar las tasas, la patente o el modelo de utilidad caducaran y estarán al alcance de todos.
Desgraciadamente, una vez que caduca la patente no se puede hacer nada al respecto. Agotado el tiempo de exclusividad, la invención pasa a ser de dominio público.